lunes, 26 de diciembre de 2016

Lecturas de diciembre

Siete años en el Tibet de Heinrich Harrer

Un libro autobiográfico del que ya conocía su existencia (hace tiempo) pero que hasta este mes no había leído.
Trata de la experiencia que tiene Heinrich (un alpinista austriaco) desde que escapa de un campo de concentración hasta que llega al Tibet. Donde conocerá, nada menos, que al Dalai Lama.
Está entretenido pero no me ha enganchado como para decir que está entre mis preferidos.

Diario secreto de Susi / Diario secreto de Paul de Christine Nöstlinger

Un cuento de mi infancia que encontré en un puesto de libros de segundo mano.
Me trajo muy buenos recuerdos.
Acabo de descubrir que, como autora de libros infantiles, Christine Nöstlinger es mi preferida.

El último Catón de Matilde Asensi

Y con esta lectura yo lo he leído tres veces. Uno de mis libros preferidos.
Ya que en éste hay de todo: acción, comedia, intriga, drama, suspense...
Me lo he vuelto a leer porque "sospechaba" que uno de mis regalos de cumpleaños sería El regreso del Catón y quería enlazar la historia.
Os dejo la sinopsis copiada de una web:
"Desde el archivo secreto de la ciudad del Vaticano, la hermana Ottavia Salina, paleógrafa de prestigio internacional, se enfrenta a un extraño enigma: descifrar los tatuajes aparecidos en el cadáver de un etíope. Con la ayuda de un capitán de la guardia suiza y un arqueólogo de Alejandría, Ottavia tendrá que descubrir quién está detrás del robo en las iglesias de todo el mundo de las reliquias de la Vera Cruz, la cruz de Cristo.
Siete pruebas basadas en el purgatorio de la Divina comedia de Dante Alighieri tienen las llaves para abrir las puertas. La expiación de los siete pecados capitales se realizará en las siete ciudades que ostentan la fama de practicarlos: Roma por su soberbia, Rávena por su envidia, Jerusalén por su ira, Atenas por su pereza, Constantinopla por su avaricia, Alejandría por su gula y Antioquía por su lujuria."

El regreso del Catón de Matilde Asensi

Mi sospecha se hizo realidad y este fue uno de mis regalos de cumpleaños.
A día de hoy sigo leyéndolo y no sé si lo terminaré en el mes (voy por la mitad).
Por ahora me está gustando y si, una vez acabado, es tan bueno (para mí) como el anterior, es seguro que le haga una reseña.

¡Feliz año nuevo! 




lunes, 5 de diciembre de 2016

Probando chuches japonesas

He vuelto a picar y he vuelto ha hacer un pedido a Japón Shop. Una tienda on-line con productos que vienen desde Japón hasta una tienda que está en España, concretamente en Villarreal (Castellón).
Y como de todo lo que hay sólo había probado lo de mi pedido anterior (y de ahí hice esta entrada: unboxing), en este elegí un poco a boleo. Pero si que sabía que quería las galletas de Shin Chan, que me llamaban la atención. Así que las pedí y tres cositas más.

Empiezo con las galletas de Shin Chan, cuyo nombre en el albarán es galletas snack chocobi Shin Chan. Son en forma de estrellas y son de chocolate.
Me han sabido un poco como los Chocapic pero con la textura más blandita de los Choco krispies, me han gustado vaya.
No sería para comerlos sin parar, pero están ricos.


Otra de las cosas es: mini cookies cup cakes mogui garden. Me llamaron la atención por la forma y bueno, por el hipopótamo del envase...
Son mini galletas con un pegote de ¿cómo se llama?, en fin ver la foto y así os hacéis una idea. 

Los hay de cuatro sabores: fresa, limón, naranja y el de color blanco no estoy muy segura.
La galletita está muy buena y el pegotito está rico pero se me hace raro, la textura es dura. Como esas chuches que son un heladito de galleta con ese pegote (jope... ¿cómo se le llama a eso?).

Tercera cosa: Kit Kat mini con sabor a frambuesa, buenísimo. Que pena que sólo haya pedido uno y fuese mini...








Y por último, he dejado lo salado, que me gusta mucho más: snack coreano goraebap (sabor barbacoa). No sé si barbacoa es a lo que sabe o no, porque es un sabor diferente a lo que para mí es el de la barbacoa. Eso sí, me han gustado mucho y de esto si que podría comerme la bolsa de un tirón. Pero como es pequeña, le daré cuartelillo para comer unos pocos mañana.


Si vuelvo a hacer algún pedido y probar algo raro (al menos para mí), ya os cuento que tal.