martes, 10 de noviembre de 2015

Hacemos el balance de lo bueno y malo

Cuando se va a acabar un año solemos hacer (como canta Mecano) el balance de lo bueno y lo malo.
Este año no sólo volvió a visitarme a la que considero mi mejor amiga, si no que además pude ir a verla a su casa y conocer donde vive, Valencia. También en este año volví a Asturias a ver a mi hermana.
Para mí estos dos hechos junto con las excursiones que he hecho junto a mis padres y Jesús los fines de semana visitando pueblos de Guadalajara que no conocía o Cuenca, son las cosas de la balanza del lado bueno. Más que bueno. Para mí estar con estas personas es lo más importante en mi vida.
Pero por desgracia, este año la balanza de lo malo me ha superado un poco. Y no porque me haya dejado vencer por la tristeza o la rabia, si no porque...
Porque este año se fueron dos personas a las que quería (quiero) mucho. María Del Carmen, mi suegra y mi abuela Esperanza. Además de Adi, el gato de la familia desde hacía 15 años.
¿Entonces, qué peso tiene en la balanza?
No quiero que sea lo que más pese, lo que "gane"... Quiero pensar en ellas, en Adi, de una forma que no duela. Que su recuerdo me deje la sensación de lo bueno de haber compartido el tiempo a su lado. No la angustia porque ya no podré repetirlo...
Me gustaría saber cómo hacerlo.
No quiero ser una pesada que cada cierto tiempo se pone tonta recordando o quiere llorar. Quiero que en mi balanza gane lo bueno. Gane la felicidad frente a la tristeza.


Libros / reto

Hacía mucho que no me ponía a escribir algo por aquí, así que me he dicho, al menos, voy a hacer una entrada de como voy con el reto de leer 50 libros en un año.
Hasta el día de hoy estos son los libros que ya he leído:
1. Oliver Bowden: Assassin´s Creed  
2. Arthur Golden: Memorias de una geisha 
3. Oscar Wilde: El retrato de Dorian Gray 
4. Ken Follet: El tercer gemelo 
5. Maeve Binchy: Tara Road, una casa irlandesa
6. Christine Nöstlinger: Konrad o el niño que salió de una lata de conservas (libro juvenil)
7. Christine Nöstlinger: Me importa un comino el rey pepino (libro juvenil)
8. Jane Jensen: La ecuación Dante 
9. Jim Harrison: Leyendas de pasión 
10. John Grisham: El rey de los pleitos 
11. Ken Follet: Doble juego
12. Agatha Christie: 10 negritos 
13. Dante Alighieri: Divina Comedia
14. Michelle Paver: La sombra ardiente
15. Charles Dickens: Para leer al anochecer
16. Ramsey Campbell: Influencia
17. Robin Cook: Mutación
18. Mary Higgins Clark: El secreto de la noche
19. Wolfgang y Heike Hohlbein: La magia del grial
20. Clara Obligado: Salsa
21. Mary Ann Shaffer y Aniie Barrows: La sociedad literaria y el pastel de piel de patata de Guernsey
22. Jack London: Colmillo blanco
23. Bianca Pitzorno: Clorofila del cielo azul (libro juvenil)
24. Steve Thayer: Mientras cae la nieve
25. Ignacio R. Martín: Soy alcohólico
26. Anne Rice: El príncipe Lestat
27. Carlos Ruiz Zafón: El príncipe de la niebla

Ahora mismo voy por el libro número 28, Mi tía y yo de Patrick Dennis,
Llevo casi la mitad del libro y estamos a día 10 de noviembre, con lo cual ya no llego para conseguir el reto. Pero ya comenté en otra entrada que es muy difícil. Lo que si me gustaría es superar el número de los leídos con respecto a los del año pasado (que si no recuerdo mal fueron unos 30).
Esto ya lo veo más posible.
Tanto como si lo consigo como si no, tengo unos cuantos libros pendientes de leer: Ceguera asesina de Robin Cook, La tapadera de John Grisham, La hora más oscura (los gatos guerreros 6) de Erin Hunter, Grk y la banda de los Pelotti de Joshua Doder y, El último hombre de David Baldacci.



Debo decir que muchos de los libros que elijo son al azar, por lo que no sé que me esperará al leerlos. Lo que sí es que últimamente éstos suelen gustarme más que los que elijo habiendo leído ya algo del mismo autor.
Por ejemplo, esperaba más de El príncipe Lestat. Ya que las Crónicas Vampíricas de Anne Rice siempre han sido mis preferidas. 
Sobre el escritor Carlos Ruiz Zafón, que no había leído nada hasta ahora, me he llevado una grata sorpresa ya que me ha gustado mucho y en cuanto pueda me haré con algún otro de sus libros.
He releído libros de mi infancia de la autora Christine Nöstlinger y me ha gustado transportarme a esos momentos en que leía en la biblioteca del colegio.
He descubierto que hay libros que de entrada no sabes qué te depararán y que según los vas leyendo te van enganchando, como me pasó con La sociedad literaria y el pastel de piel de patata de Guernsey.
Así que mientras pueda, leeré y seguiré leyendo. Aunque meterse en internet y escribir en el blog también es una afición que me gusta.
Gracias a ti si has leído esta entrada hasta el final.