viernes, 10 de julio de 2015

Reseña: La sociedad literaria y el pastel de piel de patata de Guernsey

Sinopsis
Enero de 1946: Londres emerge de las sombras de la segunda guerra mundial. La escritora Juliet Ashton está buscando el argumento para su próximo libro. ¿Quién podría imaginarse que lo encontraría en la carta de un desconocido, un nativo de la isla de Guernsey, a cuyas manos ha llegado un libro de Charles Lamb que perteneció a Juliet?
A medida que Juliet y el desconocido intercambian cartas, ella se queda atrapada en un mundo maravillosamente excéntrico. La sociedad literaria y el pastel de piel de patata de Guernsey- nacida como coartada espontánea cuando sus miembros fueron descubiertos rompiendo el toque de queda de los alemanes- contiene una galería de personajes profundamente humanos, divertidos, encantadores, todos amantes de la literatura, que sobrellevaron la ocupación nazi organizando reuniones de lectura sobre novelas clásicas, siempre alrededor de un pastel de piel de patata.
Juliet empieza una importante correspondencia con los miembros de la sociedad, pequeñas joyas que hablan de libros y del placer de la lectura, de la amistad, de la vida cotidiana y del impacto reciente que la ocupación alemana ha tenido en sus vidas. Cautivada por sus historias, decide visitarles, y lo que encuentra cambiará su vida para siempre.

Opinión personal
Como vengo haciendo de un tiempo atrás, estoy comprando libros de segunda mano que me llaman la atención por algo. En este caso fue el título. Una vez que leí la sinopsis y me pareció que podría estar bien, decidí arriesgarme. Debo decir que el libro sólo costaba 1€ por lo que si no era bueno… Pero sí que ha sido bueno, es bueno. La forma en la que te cuenta la historia al principio se me hacía rara ya que no es una historia narrada por la protagonista o un narrador, si no que te la cuentan las cartas que los personajes intercambian. Todo el libro son cartas de unos a otros. A través del entusiasmo que imprimen en sus escritos vas conociendo el carácter de Juliet (la protagonista) y del resto de personajes como si te los hubieran descrito. Puedes hacerte a la idea de cómo son. Esta forma de conocerse me hizo pensar en una amiga a la que fui conociendo a través de cartas y a la que ha día de hoy considero mi mejor amiga. Me gusta que los personajes usen la lectura como evasión a unos tiempos difíciles porque, siempre que leo, pienso que es la mejor forma de evadirse del mundo real. La historia que a simple vista es tan sencilla como que una escritora busca un nuevo argumento para un libro se convierte en un nuevo argumento de lo que será su vida futura.
Juliet a la que el lector, yo cogí cariño, coge cariño a los miembros de la sociedad literaria, a Guernsey y en especial a dos personas que allí se encuentran: Kit (una niña) y Dawsey (el desconocido de las cartas).
La lectura es amena, entretenida y con toques de humor. Y aunque hable de la ocupación alemana y haya puntos tristes se llevan bien.
Es un libro del que no tenía ni idea de lo que podría encontrar pero del que me alegro que me encontrase a mí.
Dos de los párrafos que me gustaron (por poner sólo dos…) del libro:

“Esto es lo que me encanta de la lectura; en un libro encuentras un detalle diminuto que te interesa, y este detalle diminuto te lleva a otro libro, y algo en ese te lleva a un tercer libro. Es matemáticamente progresivo; sin final a la vista, y sin ninguna otra razón que no sea por puro placer.”

“¿Alguno de ustedes ha pensado alguna vez que cuando se dio a conocer la noción de “alma”, Freud salió con lo del ego para reemplazarla? ¡Qué oportuno fue el hombre! ¿Es que no se paró a pensar? ¡Viejo irresponsable! A mi entender, el hombre debe dejarse de estupideces sobre el ego, porque lo que le aterra es no tener alma. ¡Piensen en ello!”

Autoras
Mary Ann Shaffer (Martinsburg, Virginia Occidental, 1934-2008). Trabajó como editora, bibliotecaria y librera. Ésta es su única novela.

Annie Barrows (San Diego, California, 1962). Se graduó en la Universidad de Berkeley y se convirtió en editora, aunque también trabajó de librera y bibliotecaria.

Conclusión
Tanto las autoras, como los personajes de la novela, como yo tenemos algo en común: el amor por los libros.